La obesidad afecta negativamente a la fertilidad

Publicado on May 29, 2014

La obesidad afecta negativamente a la fertilidad

En el hombre disminuye la cantidad y movilidad de los espermatozoides. En la mujer podría afectar el endometrio, la ovulación y la capacidad reproductiva. Complicaciones en el embarazo

 
La obesidad afecta al 25% de la población adulta, constituyéndose en una epidemia mundial. Sus consecuencias sobre la salud son conocidas: afecta a todo el organismo y fundamentalmente al aparato cardiovascular, respiratorio y digestivo.

El sistema reproductor no está ajeno a esto y tanto en mujeres como en hombres hay una disminución en la fertilidad que podría vincularse a factores relacionados con la obesidad.

Hay estudios que muestran que, en los hombres, cuanto mayor es el peso corporal hay una disminución en la cantidad y movilidad de los espermatozoides.

En la mujer podría afectar el endometrio –que es el tejido del útero donde se produce la implantación de los embriones- y también la ovulación, es decir, las características del ovulo, su porcentaje de fertilización por el espermatozoide y también la implantación embrionaria.

El tejido adiposo no es inerte sino que es muy activo. Cuando hay un aumento exagerado de la grasa corporal, sobre todo la localizada en el abdomen y en los órganos internos, puede producir importantes alteraciones hormonales y metabólicas.

Está demostrado que existe una menor posibilidad de éxito de embarazo en pacientes obesas que realizan tratamientos de fertilización in vitro; cuanto mayor es la tasa de obesidad menor es la posibilidad de embarazo.

Estudios recientes muestran que existe una organización diferente en la estructura del óvulo de una mujer obesa y que eso es lo que podría llevar a alteraciones que posteriormente disminuirían la posibilidad de embarazo.

Las hormonas como estrógeno, progesterona y de origen en la glándula hipófisis –como LH y FSH- se encuentran en niveles alterados en la obesidad.

En pacientes obesas embarazadas existe mayor riesgo de complicaciones como la hipertensión, gestosis o diabetes gestacional, por mencionar algunas, y esto genera diferentes dificultades tanto para la embarazada como para el recién nacido.

 

Fuente: Clarín
 

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