“No sabía que la diabetes Tipo II puede solucionarse con cirugía”
Andrés Aguilar es un madrileño de 57 años que padece diabetes Tipo II y gracias a la cirugía ha conseguido controlar una enfermedad que estaba poniendo en gran riesgo su salud. Para él la experiencia de recuperar la calidad de vida ha sido impactante y reveladora. Por ello ha querido compartir su testimonio mediante la siguiente entrevista para que las personas con Diabetes Tipo II descubran que existe una alternativa a la Enfermedad.
¿Cómo ha sido tu experiencia con la cirugía de diabetes?
La larga trayectoria del Dr. Durán, su experiencia profesional y humanidad le preceden. Sólo puedo decir que la intervención quirúrgica que me realizó para combatir la DIABETES Tipo II, nos ha cambiado la vida a toda mi familia y en todos los sentidos.
¿En qué medida te estaba afectando la diabetes Tipo II?
Yo tenía pronosticado por los especialistas que en menos de 10 años, debido a la Diabetes descontrolada que padecía, tendría un deterioro físico tan acusado que posiblemente en ese tiempo acabaría en una silla de ruedas.
¿Qué pasos diste antes de tomar la decisión de operarte?
El año pasado, tuve la oportunidad de acompañar a mi mujer a consulta y al preguntarme el Dr. Durán como estaba “mi diabetes”, le contesté que la tenía muy descontrolada y no me encontraba bien. Me propuso realizarme unas pruebas con el fin de estudiar mi estado físico en general, informándonos que hoy en día siempre que cumpliera el PROTOCOLO, esta enfermedad tenía solución a través de la cirugía -cosa que desconocíamos-, además de que nos quedamos sorprendidos de que este avance no hubiera trascendido más en beneficio de tantas personas que padecemos esta enfermedad.
¿Cómo te encuentras hoy en día?
Aunque mi recuperación está siendo más lenta que en otros pacientes más jóvenes, pues no dejo de tener ya 57 años, o que posiblemente no se encontraban en el estado crítico en el que estaba yo, puedo decir que en poco tiempo mis niveles de glucosa pasaron a ser casi normales, la diabetes está controlada y los daños colaterales en riñón, vista, circulación y sobre todo hipertensión han remitido satisfactoriamente. Hoy hace justo un año y solo puedo decir que mi vida comenzó un 26 de Noviembre de 2012. Quiero dedicar mi testimonio personal al Dr. Durán y decirle desde aquí… ¡¡¡ MIL GRACIAS¡¡¡
Madrid, 26 de Noviembre de 2013
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